Éramos dos adolescentes y no sabíamos mucho.
La ingenuidad que asomaba en su mirada era escalofriante, sin embargo, la seguridad que emanaba su piel me instigaba a continuar las caricias, los besos…
Sucedió: una tarde como otra cualquiera hicimos el amor…
… yo fui su primera vez.
como me dijeran/escribieran una vez «tu y tus primeras veces» jjajajja, que nostalgia
Tuvo suerte, mucha. Porque para los hombres, aunque algunos machistas no lo reconozcan (o por el propio machismo, no lo disfruten), la primera vez también es muy importante.
…los dos tuvimos suerte, compartimos un momento mágico.