Después del judo

 

Adolorida, con las piernas doblándose, con el pecho que quiere explotar, con los brazos inservibles, feliz.

La plata en el judo, a pesar de sus pequeños ¨problemillas¨, me hizo sentir feliz.

 

5 comentarios sobre “Después del judo

Agrega el tuyo

  1. Este post ha sido una sorpresa para mí. Nada, que el mar también puede ser bravío. De todos modos, seguiré pensando que tu cinta de judo te queda mejor… en el pelo.

    1. Bueno Enrique, recuerda que el mar a veces tiene oleaje y, qué mejor manera de calmarse que batirse contra las rocas.
      En cuanto a las cintas… bueno, me quedo con las 2.

Replica a Yudivián Almeida Cruz Cancelar la respuesta

Blog de WordPress.com.

Subir ↑