Fue un encuentro raro, de esos que no se esperan.
Fue un beso raro… fue una casa rara.
Fue un abrazo raro, de los que se alargan.
Fue una sonrisa rara.
Fue una excusa, no rara, tonta.
Fueron ellos.
Se encontraron, se besaron, se abrazaron… hicieron el amor.
Al final, creo que todo fue algo raro.
raro no es un buen adjetivo para nada
Y qué adjetivo sugerirías?? me estoy quedando falta de imaginación 😦
NO jeje para nada, me encanta tu blog me refiero a la historia, no me gustan las cosas calificadas de raras, por eso digo que raro es una mala señal
Bueno, es una mezcla de buena y mala señal, la verdad es que no se cómo describirla.
Rara me pareció la palabra indicada
ya te dije que el problema no es el adjetivo jejeje es que no me gustan las cosas rarassssss
A mi tampoco, me gustan las cosas claras, creo que son mejores.
Pero bueno, a otras personas les gusta complicarse. C’est la vie.
🙂
Es raro que, siendo tan original, no gustes de las cosas «raras». Tu post, por ejemplo, es algo raro, porque no se espera (en otra gente). Pero contigo uno lo busca porque sabe que, al final, está ahí. Yo pienso que eres una estatua de la rareza y me parece muy bien.
Gracias Enrique, tú siempre me elevas el ánimo.
Si alguien me dice rara como me lo dices tú, me encantará.
No es lo raro del momento, es la rareza de las personas, dada muchas veces por intenciones trocadas…
Sin embargo tu polémico «raro» me parece bien, por todas la interpretaciones ambiguas que pueda tener: no es que sea feo, es que es raro, no es que sea común, es que es raro. Tiene la probabilidad del ser impropio, la facilidad de la duda, el poder de la elección, de las interpretaciones, lleva implícito cualquier pensamiento abstracto.
Raro o atípico… me parece bien, lo importante es distinguirlo y lo has logrado.
Un beso amiga…
Mr. A veces las intenciones no están trastocadas, simplemente, en muchas ocasiones, no se sabe qué hacer.
Y Beth, gracias de nuevo por llegarte, quizás este blog sea así… un poco raro.