Lo confieso, no me gusta rebloguear. sin embargo, en este caso no he podido evitarlo. Ha sido uno de los post que más me ha impactado en lo que llevo en la web. Espero que lo disfruten tanto como yo.
Sólo es una promesa, una autopromesa, una petición de principio, una deseo que es más que deseo, que lo contiene y lo supera; una obligación para conmigo, un anhelo, una orden que me impongo aunque no me gusten ninguno de los dos términos de la sentencia, pero qué diablos, juro (y el hacerlo público más me obligará a ello) que a partir de éste momento voy a robar toda la vida que pueda.

Caramba, qué sensación extraña. Es la primera vez que me «rebloguean» y se siente algo extraño. Una mezcla de vergüenza pública y satisfacción.
Gracias Mar, y me alegra que compartas el deseo (al rebloguearlo, has hecho tuyas esas mínimas palabras mías).
Cariños.
Pues Borgeano querido, he sido sincera, este post me suyo me fascinó. Me perdona la apropiación??
Qué más da expresarse en otro… lo importante es expresarse.
Bello post Borgeano, me uno a Mar en sus muestras de admiración.