Y viene un libro -por enésima vez- a sacarme los colores. Vuelve a ser la poesía quien me exprime. Me recoje del piso los recuerdos y, de a poquito, los va poniendo bien juntos (como si de un rompecabezas se tratase) en lo que el proyector repasa una y otra vez las memorias. Es cierto,... Continue Reading →
Yo te convido a creerme cuando digo futuro…
Nos volvimos a encontrar en uno de esos cafés sin ruido que la gente suele usar en las primeras citas. Los dos (casualidad rara) andábamos solos. Nos sonreímos y, casi sin pensarlo, unimos las sillas en busca de ese vínculo añejo que tiempo atrás compartimos. Hablamos -como mandan las buenas costumbres- del tiempo, las familias,... Continue Reading →
De la ciudad y del mar, como otros tantos versos
Comienzo a leer a Montenegro (el autor de este texto) y una sonrisa se me dibuja en el rostro... un texto trampa, dirían algunos... un texto lazo, argumentarían ellas. Yo, por el amor al arte, se los regalo entero. De la ciudad y del mar En 1901, por miedo al mar, en La Habana comenzaron... Continue Reading →
Posibilidades y preferencias
Y viene la Wislawa a recordarme el amplio mundo de las posibilidades cuando me habla de Dickens, los gatos y los ojos claros. Y claro, yo también prefiero ser ridícula escribiendo versos a ser ridícula sin patentarlos. Difiero (no soy perfecta) con su apoyo a los moralistas... me decanto por los inmorales, los decadentes y... Continue Reading →
Epifanía (I)
Ser rubia es la mejor excusa para pasar por tonta. He descubierto la veta madre.
To shave or not to shave
Afeitarse es más bien un acto de voluntad -me dice una amiga a la que le duran 2 semanas las maquinitas- yo, por ejemplo, lo hago todos los días. Una no sabe a quién se va a encontrar por ahí. Por supuesto, comparada conmigo, que soy rubia y apenas me salen 3 pelos en las... Continue Reading →